Hace algunos años (como 15) personifiqué al tristemente célebre
Chacal de la Trompeta. Si, como él del programa de televisión "Sábado Gigante con Don Francisco", en el que mi papel era el de juzgar el talento de los cantantes, y descalificarlos con el "TATA, TATA, TA, TA" de mi trompeta... fue muy dificil: tocar la trompeta, descalificar era realmente fácil. (lo mejor de todo fue que nadie sabía que era yo, y que además me pagaban)